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¿Qué es el acero?

El acero es una aleación de hierro y carbono en la que el segundo elemento se integra en una proporción que varía entre el 0,008 y el 2,11 % y que, según el tratamiento que se le dé, adquiere especial elasticidad, dureza y resistencia. Por eso se suele denominar como acero al carbono.

Este no se fractura cuando se somete a un esfuerzo excesivo y soporta muy bien los golpes y arañazos. Y también, es bastante maleable lo que significa que puede ser modelado en variedad de formas sin que se rompa.

La propiedad única del acero de combinar dureza y resistencia con maleabilidad se denomina plasticidad; y lo hace ideal para la fabricar cientos de productos. Además, soporta altas temperaturas, conduce muy bien la electricidad y es ferromagnético, lo que facilita mover la chatarra y el acero en proceso dentro de las siderúrgicas.

Todas estas características lo han convertido en un elemento vital para el desarrollo industrial pues está presente en todo tipo de infraestructuras, en los medios de transporte y en un sinfín de elementos de uso cotidiano que nos facilitan la vida.

Y una enorme ventaja del acero: es ciento por ciento reciclable y por lo tanto un gran participante en la economía circular, contribuyendo a la sustentabilidad empresarial y a la preservación de nuestro planeta.

¿Qué son los aceros HR y CR?

En las siderúrgicas el acero al carbono se convierte en lingotes los cuales se laminan en caliente mediante presión de grandes rodillos para obtener el denominado acero hot rolled (o acero HR), que tiene una gran resistencia y se utiliza para fabricar rieles de trenes, vigas para construcciones, perfiles muy robustos, tubos estructurales, tubos agua negra, planchas y láminas HR con espesores de 1,9 a 12 mm.

A partir de las láminas HR se obtiene el acero cold rolled (o acero CR), que se comercializa en forma de láminas y tubos. El nombre significa “laminado en frío”, proceso que consiste en pasar sucesivamente dichas láminas por grandes rodillos que, mediante altas presiones, les van bajando el espesor, modificando sus propiedades y su acabado.

La lámina CR es el tipo de acero con más usos. Relativamente económica, abunda en el mercado y es fácil de procesar por lo que se usa para producir muebles, electrodomésticos, partes automotrices, envases, zunchos, puertas, piezas para dispositivos, etc.

A los aceros HR y CR se les aplican esmaltes, lacas o pintura electrostática, que ofrecen una excelente presentación, con variedad de acabados. Y además, los protegen de la oxidación y la corrosión. Y para exteriores se previenen estos fenómenos mediante recubrimientos a base de zinc, cobre o níquel. Aunque también se utiliza pintura epóxica, la cual tiene dos componente que al reaccionar le dan una gran resistencia.

¿Qué es el acero inoxidable?

Cuando el acero al carbono queda expuesto a los elementos se oxida, formándose óxido de hierro en su superficie. Si no se combate la oxidación, esta sigue adelante hasta que el acero queda completamente corroído. De ahí la necesidad de pintarlo o aplicarle recubrimientos.

Como alternativa se creó el acero inoxidable, una aleación de acero que contiene entre 10 y 12% de cromo, aunque también puede incluir porcentajes menores de otro metales como níquel, molibdeno y tungsteno.

Sin embargo, y a pesar de su nombre, el acero inoxidable también se oxida; pero en vez de óxido de hierro, en su superficie se forma una delgada película de óxido de cromo, muy densa, que constituye una coraza contra los ataques de la corrosión y que se conoce como capa pasiva. Y si se elimina esta, el óxido se vuelve a formar inmediatamente al combinarse el cromo con el oxígeno de la atmósfera.

Esta capa pasiva, de muy poco espesor, se crea sin importar que la superficie haya sido rayada o dañada y explica por qué el acero inoxidable no requiere ningún recubrimiento u otra protección para mantenerse limpio y brillante. Pero, en ciertos ambientes extremos, el acero inoxidable pierde brillo y con el tiempo puede incluso llegar a facilitar la corrosión. Por ello, se desarrollaron otros tipos de acero más resistentes.

¿Qué variedades de acero inoxidable existen?

Existen muchos tipos de aceros inoxidables que buscan satisfacer diferentes necesidades. Estos se clasifican en varias familias que ha establecido el Instituto Americano del Hierro y el Acero (AISI, por sus siglas en inglés), entre las cuales se destacan:

- Aceros martensíticos, que incluyen parte de la serie AISI 400. Tienen una resistencia moderada a la corrosión, altos niveles de resistencia mecánica y dureza, son magnéticos, tienen un contenido de cromo de entre 10,5 y 18%, y un alto contenido de carbono (hasta 1,2%), por lo que su soldabilidad es pobre.

- Aceros ferríticos, que incluyen a la mayoría de aceros de la serie AISI 400. Tienen una resistencia a la corrosión de moderada a buena, son magnéticos, su soldabilidad es pobre lo mismo que su dureza, por lo que se utilizan sobre todo en procesos de formado en frío. Contienen cromo en un porcentaje que varía entre el 10,5 y el 30%, y poco carbono (0.08%).

· Aceros austeníticos, que contiene el mayor número de aleaciones de las series AISI 200 y 300. Son muy populares gracias a su excelente formabilidad y gran resistencia a la corrosión. Se endurecen por tratamiento en frio, tienen muy buena soldabildiad, un excelente factor de higiene y limpieza, soportan sin problema temperaturas extremas y no son magnéticos.

Estos aceros se obtienen adicionando elementos que forman la austenita, una forma de ordenamiento específico de los átomos de hierro y carbono, que se logra adicionando elementos como níquel, manganeso y nitrógeno. El contenido de cromo generalmente varía del 16 al 26% y su contenido de carbono oscila entre 0.03 y 0.08%.

¿Qué es el acero inoxidable 304?

El acero inoxidable 304 es el acero austenítico más utilizado. Contiene un 18% de cromo y un 8% de níquel, aunque también puede contener pequeñas cantidades de otros metales como níquel, titanio y cobre. No es magnético, no se puede endurecer por tratamiento térmico y ofrece excelentes propiedades de ductibilidad y resistencia al impacto, lo que lo convierte en una elección adecuada para diversas aplicaciones.

Y aunque es más costoso que los aceros ferríticos, de todas maneras tienen un precio accesible, características que los han convertido en uno de los materiales favoritos de la industria.

Con este acero se fabrican utensilios de cocina, equipos industriales, tanques, tuberías, intercambiadores de calor y componentes para la industria química y alimentaria. Además, tiene un amplio uso en la fabricación de muebles para cocinas, industria alimentaria e instituciones hospitalarias.

De todas maneras el acero inoxidable 304 aunque es muy resistente a la corrosión, no es completamente inmune a la misma siendo susceptible a esta en presencia de soluciones con un alto contenido de cloruros o en ambientes salinos.

Por ello, para ciertos usos se utilizan otros tipos de aceros aún más resistentes a la corrosión como el acero inoxidable 316, que contiene molibdeno, el cual aumenta la resistencia a la corrosión general, mejora la resistencia a las soluciones de cloruros y soporta mejor las temperaturas elevadas.

¿Qué ventajas tienen los lockers en acero inoxidable 304?

Los lockers en acero inoxidable 304 superan ampliamente la vida útil de los mismos muebles en otros materiales.

Previenen la contaminación de ropa e implementos y su superficie facilita la limpieza y la desinfección, de manera que son ideales para laboratorios, instituciones hospitalarias e industrias donde se manipulan alimentos.

Además, producimos lockers en acero 304 con puertas en malla del mismo acero, que favorecen laa ventilación y permiten apreciar el contenido, sin abrir los compartimientos.

¿Qué ventajas tienen los armarios en acero inoxidable 304?

Los armarios en acero inoxidable 304 superan ampliamente la vida útil de estos mismos muebles en otros materiales.

Previenen la contaminación de materiales e implementos y su superficie facilita la limpieza y la desinfección, de manera que son ideales para laboratorios, instituciones hospitalarias e industrias donde se manipulan alimentos.

Además, producimos armarios en acero 304 con puertas en malla del mismo acero, que favorecen la ventilación y permiten apreciar el contenido, sin abrir las puertas.